A lo largo de los días, la Nación Patriota ha iniciado un juego de culpas que es considerablemente grande. En él se culpa desde el QB Mac Jones hasta el staff liderado por el HC Bill Belichick; en este último, podemos notar que no todos ponen de su parte y nombres como Dante Scarnecchia son extrañados. Su reemplazo, el coach de OL, Adrian Klemm, no parece estar cumpliendo su trabajo.
En este artículo entraremos a detalle sobre cuanto ha impactado positiva o negativamente en esta unidad. ¿Qué tanta responsabilidad debe recaer en él y sus muchachos?
Si lo vemos meticulosamente, es difícil creer que de este grupo conformado por dos ganadores del SB como OT Trent Brown, C David Andrews y linieros del calibre del G Michael Onwenu y una primera ronda como el G Cole Strange tengan tantos problemas, incluso más que el año pasado bajo las órdenes del coach Matt Patricia.
No pueda existir estabilidad; entonces no es tanto la materia prima, es quien trabaja esa materia (o entrena en este caso). Klemm llegó como una mejora en el staff de coacheo, según pensamos, después de su buen trabajo en la Universidad de Oregon.
Nadie se puso a pensar de su primera aventura en la NFL y por qué se fue de los Steelers en primer lugar, donde se fue y el RB Najee Harris acabó promediando 3.9 yardas por acarreo y la unidad completa apenas funcionó protegiendo al QB (algo que tampoco es distinto este año).
Además tenía una OL construida por más talento joven, que veterano esa temporada. Si esperamos que arregle el problema en el próximo Draft NFL, es un dato a tener en cuenta.
¿Qué fue primero, el huevo o la gallina? ¿Se necesita un mejor coach o un mejor plantel de jugadores?
El HC Bill Belichick siempre trabaja con un Staff con el que tenga cercanía y confianza. No me malinterpreten, traer a su antigua selección de Draft del 2000 para ayudarle con la línea ofensiva, tenía sentido; pero las banderas rojas tal vez poseen una gran influencia en este momento.
La organización de Pittsburgh es bastante meticulosa para no crear escándalos internos, tampoco son dados a correr entrenadores (véase Matt Canada), entonces es sorprendente que no pudieron esperar hasta el final del año para echarlo.
Siendo justos, en la Universidad de Oregon sí que logró la mejor línea ofensiva del colegial sin jugadores espectaculares. En el transcurso de 2022 solo permitió cuatro capturas en la temporada, aunque no tuvo ningún seleccionado en la primera ronda del 2023.
De hecho, para un grupo que jugó excepcionalmente solo fueron seleccionados el OT Malaesala Aumavea-Laulu en la sexta ronda por los Baltimore Ravens y el C Alex Forsyth en la séptima ronda por los Denver Broncos; ambos ni siquiera figura como suplentes directos en este momento.
Todo esto te puede llevar a dos conclusiones crudas, pero realistas:
Al final, es pronto para echar un coach con un roster que no hace fácil culparlo de sus deficiencias. Queremos de regreso a Dante Scarnecchia, pero tampoco seamos injustos, este grupo no entusiasma a nadie y difícilmente una leyenda haría milagros con esto. En todo caso, el GM Bill Belichick tiene que asumir la culpa de un grupo que cuenta con un montón de personal y muy poco talento desde hace años. El problema no se soluciona solo cambiando de coach.
¿Qué opinas al respecto? ¿Qué harías tú en el lugar de Adrian Klemm? ¿Deberían echarlo? Puedes dejarnos tus comentarios debajo de este artículo o a través de nuestras publicaciones en redes sociales.
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