¿Debemos preocuparnos del progreso de Mac Jones?

La temporada 2022 de la NFL ha iniciado y el segundo año de Mac Jones comenzó con una derrota dolorosa en Miami. Con una línea ofensiva que no lo cubre y receptores que no se separan, ¿Bill Belichick habrá tomado las decisiones correctas para el segundo año de su QB?

Un esfuerzo de Mac Jones no correspondido

El joven pasador seleccionado en la primera ronda del Draft 2021, dejó buenas sensaciones el año pasado con estadísticas muy respetables para un QB novato. Llegó incluso a terminar la temporada con un récord de 11-5 y meter al equipo a playoffs.

Ciertamente, Mac Jones ha recibido críticas principalmente en cuanto a la fuerza de su brazo y poca movilidad, sin embargo, con lo que hizo en la offseason, también nos queda claro que el joven pasador hará lo necesario para competir al máximo nivel.

Nadie puede recriminarle a Mac Jones que no está haciendo todo lo que está en su control para ser el QB que esperamos de él. Durante la temporada baja se puso a dieta, ganó músculo e incluso tuvo sesiones privadas con el legendario entrenador de lanzadores Tom House. Su dedicación y ética de trabajo es una referencia para todos sus compañeros, al grado que recientemente fue nombrado uno de los capitanes del equipo.

Es entendible que la presión aumente en un equipo que estuvo acostumbrado a competir a los máximos niveles durante 20 años, pero Jones no parece tener la respuesta favorable del equipo para el que juega.

La promesa de Mac Jones es manchada por negligencias

La segunda temporada para cualquier QB parece ser un punto de referencia muy importante donde pareciera que se establece quien tiene la capacidad de convertirse en QB franquicia y quien no. A pesar de haber tenido una muy buena temporada de novato, juegos como este incrementan aún más el escepticismo en Mac Jones como el QB que los Patriots necesitan.

En lugar de rodearlo de mejores opciones, parece que los Patriots han ido un poco en contra de su ideología, incluso cambiando su tradicional concepto en ofensiva. Algo que quedó evidenciado para mal en los partidos de pretemporada, donde por momentos la ofensiva lució inoperante, igual que en Miami. En consecuencia, lo fácil es pensar que Mac Jones ha llegado a su techo de crecimiento, pues no parece elevar el talento a su alrededor. ¿Pero qué talento es ese? Sinceramente, no podemos esperar mucho cuando su línea ofensiva le dio menos de 3 segundos para lanzar el balón, el 97% del tiempo, según Chad Graff de The Athletic. Y peor aún cuando su mejor receptor solo tuvo 55 yardas por aire (Jakobi Meyers) y sentaron casi todo el partido al segundo mejor (Kendrick Bourne).

El actual panorama de New England y su QB

Es innegable que no solo lo que Bill Belichick decidió ha complicado todo. Es difícil obviar los factores externos, como que Josh McDaniels decidiera probar suerte como head coach en Las Vegas. Y aunque Matt Patricia no ilusiona como playcaller, más allá de su diseño de juego, el problema es claramente la ejecución y eso está afectando el notorio avance de la temporada anterior:

Sin embargo, en ese problema hay más detalles importantes que simplemente no están aprovechando su talento como pasador. En su lugar, los Patriots insisten en ponerlo en situaciones contrarias a sus atributos naturales, todo esto en una ofensiva que quiere ir más rápido, lo único que consigue es el lentísimo ritmo del domingo pasado.

El complicado camino por delante

Al final puede ser difícil entender lo que busca Bill Belichick y si puede funcionar, pero en 2016 demostró estar listo para un QB distinto que Tom Brady y nuevamente en 2021 lo demostró. La cuestión es que parece estar haciendo lo contrario este año, al no escuchar a Mac Jones y el resto de su equipo. Después de este baño de humildad, sería una tragedia que esa versión del genio se pierda en la que últimamente se critica.

Yo sí creo que en Bill Belichick y en especial, en Mac Jones, pero es momento de entender que este año puede definir la carrera de ambos. Por consiguiente, es difícil no preocuparse por actuaciones como la de la semana 1 de la NFL.

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