¿Es mejor pensar en 2024? Otra humillación para los Patriots

Hace poco analizamos las actuaciones individuales de los Patriots en la derrota contra los Raiders en la semana 6 NFL. Con un récord actual de 1-5, la sensación es de que esta temporada NFL 2023 llegó a su abrupto final a partir de ahora, con muy poco que competir el resto del año y con severas dudas en adelante.

En este artículo veremos lo que hemos aprendido de los Pats en este momento y lo que puede significar para más adelante.

Con o sin Bill Belichick, ¿los Patriots deben pensar en 2024?

Es difícil saber qué pasará con Bill Belichick en los próximos meses. El dueño, Robert Kraft, dijo que quería ir a playoffs este año, pero es seguro que no sucederá; aunque, por otro lado, nada indica que él piense echarlo.

Nadie niega que Bill logró algo importante estos tres años: rearmar a su defensiva en algo único y especial (lástima por las lesiones), pero en el resto le falta nuevas ideas, mejores voces y más delegar trabajo. Si algo hizo especial su dinastía es que teníamos a Ernie Adams, Ivan Fears, Dante Scarnecchia, etc. No solo era Tom Brady, era un staff que deberá estar en el Salón de la Fama.

Será interesante ver qué se decide con esto, pero nada bueno sale de tomar decisiones con el corazón. Si lo van a echar, no pueden simplemente hacerlo y traer a cualquiera, porque como pasó con Tom Brady, son zapatos difíciles de llenar, por mucho que estos años fueron duros. Vean a los Giants o los Niners y sabrán de lo que se habla; no solo es cambiar por cambiar.

Pero si se queda, la sacudida tiene que ser importante, no puede seguir como hasta ahora.

Mac Jones es insalvable en los Patriots

Los reportes antes del juego en Las Vegas decían que los Patriots no tendrían mucha consideración por él si seguía a la baja, pero aunque no lo sentaron en el partido, tampoco parece que fuera porque les demostró que es el QB que necesita esta franquicia.

Tras tener su sexta entrega de balón en las últimas semanas, Jones logró 24 de 33 pases para únicamente 200 yardas. Su mejor serie no fue crédito a su astucia o habilidades, sino que el OC Bill O’Brien confío en su ataque terrestre para avanzar 75 yardas en 10 jugadas hasta culminar en el TD. Eso habla de que no existe confianza en Jones y podría ser que jamás regrese.

El de tercer año se ve claramente peor que al comienzo de su carrera, habiendo adquirido malos hábitos desde su experiencia en la campaña pasada. Esto te dice varias cosas, pero la más importante es que este no es el lugar para que florezca si es que todavía tiene algo que ofrecer a la NFL.

Lo mejor es que se vaya el próximo año. Existen equipos como los Rams que no tendrán problema en darle cabida, rodearlo de talento y dejarlo aprender de un veterano más talentoso. No va a tener la misma presión que aquí y eso le ayudaría.

Los corredores se merecen algo mejor en este equipo

De lo poco rescatable de este desastre en ataque, debería ser el RB Ezekiel Zeke Elliott. Esta semana logró 4.9 yardas por acarreo, un total de 49 yardas desde la línea de scrimmage y fue clave en el primer TD del equipo, pues él lo anotó.

De igual forma, el RB Rhamondre Stevenson se llevó el segundo (y último) de los Pats, siendo otra vez un poco más cercano a su versión de 2022, con más de 1 000 yardas por tierra, que a la de semanas pasadas.

Uno se pregunta: ¿qué tan diferente serían las cosas con ambos con una OL en condiciones?

Kendrick Bourne es el WR1 de los Patriots

Con un promedio de 8.9 yardas por recepción, Bourne lideró en casi todas las categorías de New England por aire. También tuvo un acarreo para cuatro yardas, algo que no le veíamos hacer en mucho tiempo y que fue una bocanada de aire fresco por un instante.

Bourne solamente tiene contrato hasta este año, no es un tipo élite, pero es el mejor receptor del equipo. El HC Bill Belichick ya cometió un grave error dejando ir al WR Jakobi Meyers el año pasado, por lo que la organización debe hacer una prioridad mantenerlo y traerle compañeros de mejor nivel. Pero al menos en actitud, no nos vendría mal más de jugadores como él.

La línea ofensiva es una desgracia

Habría que remontarnos fuera de la etapa de Belichick para hallar una peor OL de los Patriots en su historia. Este año no protegen al QB, no abren espacios por tierra y cometen demasiados castigos. Contra Las Vegas cometieron cuatro castigos de los 10 que hizo todo el equipo.

También permitieron cuatro capturas y el safety que acabó por hundirlos al final del juego.

No importa si es Jones o Caleb Williams, esta línea es indigna de cualquier QB y es momento de que el equipo revise el contrato del coach Adrian Klemm, porque cobrar tanto para tan poco es un robo.

Pese a las lesiones, la defensiva seguirá siendo un punto fuerte

Perdieron a cuatro esquineros por lesión este año, el LB Matthew Judon no volverá hasta quien sabe cuándo y, pese a todo, la defensiva de los Patriots sigue sacando la cara por el equipo en la mayoría de los juegos.

Se le pueden achacar muchas cosas al head coach, pero se propuso tener una gran defensiva, y con todos sanos, vimos su potencial en la semana 1. Con el regreso del CB J.C. Jackson que se ve mejor de lo esperado, el próximo año no da para pensar en invertir mucho más aquí, solo en recuperar jugadores.

Incluso dejando ir a algunos veteranos en la próxima agencia libre, en este momento hay personal para reemplazar a cada uno. Lo mejor es que todos los recursos se vayan a la ofensiva.

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