Los New England Patriots salieron al U.S. Bank Stadium con la intención de extender su racha de victorias a 4 en la presente campaña. Lastimosamente, los Vikings tenían otros planes, y se llevaron 33-26 este encuentro de jueves por la noche.
Dentro de lo rescatable, estuvo una ofensiva área mucho más sólida, aunque enfrentó una defensiva bastante porosa en ese sentido. Sin embargo, hicieron lo posible por ganar con 2 linieros ofensivos titulares ausentes y al final, otros les quedaron mal.
A continuación, veamos quienes se salvan de las críticas y quienes se las ganaron.
Con mucha mejor protección que semanas previas, Mac Jones fue altamente eficiente en sus 39 intentos de pase en el juego; al final consiguió 28 completos para 389 yardas, 2 TD, y aunque lo capturaron 3 veces, su rating de pasador se mantuvo arriba del +100. Teniendo en cuenta que la ofensiva produjo 409 yardas en total, realmente fue el mejor jugador en este ataque.
Nuevamente, fue el mejor receptor del equipo en pase largo. Y con la lesión del WR Jakobi Meyers, a la larga se convirtió en el mejor aliado de Jones en la noche, acabando con 4 recepciones para 80 yardas.
Desde 2021 que no había sido tan decisivo en zona roja, y aunque los oficiales le arrebataron su segundo TD de la noche, asestó tres recepciones para 63 yardas. Si hubiera que criticarle algo, es que no se salió del campo con pocos segundos antes del descanso, forzando a usar un tiempo fuera innecesariamente.
Tiene su mérito tener un juego productivo aún con bajas sensibles en los tackles y el centro de su línea ofensiva. Gran parte de ello, fue porque finalmente hubo química y hasta el novato Cole Strange fue exactamente lo que se esperaba de él saliendo del Draft. Gracias a ella, el resto de la ofensiva adquiere otro ritmo y es capaz de luchar. Veremos si siguen así contra Buffalo.
Le permitieron 139 yardas al WR Justin Jefferson, aun cuando lo cubrieron entre 2 defensivos constantemente. Además, hubo errores garrafales en coberturas sobre el WR Adam Thielen y TE T.J. Hockenson. Así, a pesar de dominar al RB Dalvin Cook, la frontal recibió cero apoyo de sus compañeros detrás del ovoide e hicieron ver a Cousins como el mejor QB de la liga.
Se nota cuando Dugger tiene un mal día, pues todos los resienten. Su duelo contra Hockenson fue terrible, permitiéndole 1 TD en su revancha (se enfrentaron en la semana 5). Tampoco aportó en equipos especiales, fuera de un castigo que no le marcaron y no anuló el TD de la jugada. Probablemente su juego más flojo en todo el año.
Este jueves no fueron nada especiales. Lo que más asusta, es la regresión de cara a la recta final del año, cuando menos se necesita. Hasta el novato Marcus Jones fue anulado por completo. Lo demás sigue sin resolverse: despejes dudosos, malas coberturas en kickoff. En fin, el coordinador Cam Achord podría estar fuera del equipo a este ritmo. Los errores de su unidad costaron 14 de los 33 puntos en contra, no hay mucho más que decir.
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