El despido del HC Josh McDaniels fue algo que todos veían venir desde hace tiempo, hasta que finalmente los Raiders lo hicieron realidad el 31 de octubre de este año. Por supuesto, no faltan los que creen que va a regresar a New England tarde o temprano, sencillamente porque acá es el único lugar donde funciona bajo la atenta mirada del HC Bill Belichick, su mentor.
Y así como podría necesitarlo para su carrera, el QB Mac Jones probablemente lo necesite junto al resto de la ofensiva. No hay que olvidar que bajo su tutela, es que el pasador de tercer año se vio capaz de guiar a los Patriots hasta playoffs, pese a las limitaciones de este ataque. ¿Tiene sentido traerlo mientras un nuevo personal en ofensiva trata de establecerse en esta organización?
Apenas 21 meses (y 25 juegos de NFL) después, McDaniels vuelve a estar sin equipo. Los Raiders no titubearon mucho más, decidiendo que lo mejor era separar caminos y anunciando la salida del entonces head coach a través de un comunicado, donde también se reveló que se fue junto al GM Dave Ziegler, otro ex pupilo de Belichick.
Para nadie fue una sorpresa porque Las Vegas estaban mal desde el año pasado. Su récord de 9-16 tenía frustrado hasta los jugadores que trajo pensando que lo respaldarían, y aquellos que jugaron mejor en su sistema (ej. RB Josh Jacobs). Y si bien ha demostrado tener momentos brillantes en ataque (no tanto este año), como el que pone y quita en un vestidor es un desastre; 20-33 es el récord de Josh a lo largo de dos etapas como head coach en la NFL (no se cuenta su efímero paso en Indianapolis, pues ni debutó).
Cuando la responsabilidad era de Bill, era otro cantar. Es cierto que muchos cuestionan si su carrera se debe a Tom Brady, pero estuvo 3-1 en aquella suspensión del ex QB; también 11-5 con Matt Cassel de titular y con Jones se metieron hasta playoffs jugando arriba de lo esperado. Quien lo ha seguido en la organización, sabe que es un elemento valioso cuando está aquí.
A casi dos años de su salida, nadie discute que sería un gran apoyo para Jones pensando en que no se vaya en 2024 (y es muy probable que se quede). El ex de Alabama no solo decayó deportivamente hablando, también lo hizo su confianza y eso no era así con McDaniels.
El OC Bill O’Brien no ha dejado de tener críticas porque no puede recuperar esa versión de 2021 del QB, pero para ser justos, tampoco la tendría fácil el coordinador tres veces ganador del SB. Este equipo va último de la AFC con un récord de 2-6, no por falta de ideas, sino de talento en su roster. Y como ocurrió con BoB en su regreso, no basta un entrenador para cambiarlo radicalmente, ni un staff completamente distinto.
Como comentó Devin McCourty hace rato, es probable que McDaniels elija mantenerse fuera de la NFL unos meses antes de retomar su carrera, menos querrá venir a una situación tan complicada habiendo salido de otra hace poco. Los Raiders tienen que pagarle los siguientes cuatro años por contrato, y si bien puede significar que Belichick lo traiga sin costo, también que no hay urgencia por salir del desempleo.
Lo más realista es esperar que ocurra en 2024, con Josh McDaniels en una especie de rol más enfocado en el QB y que O’Brien se concentre en los otros innumerables problemas de la unidad. Tomando como referencia hace años, en 2011 sucedió algo parecido; McDaniels salió de los Rams y al regresar, con Billy O como coordinador ofensivo, tomó un papel de consultor en esa unidad.
No obstante, tengamos en cuenta que la dinámica fue apenas durante playoffs y había una razón detrás mucho más importante: O’Brien se iba a ir al final del año a Penn State y necesitaban preparar a su reemplazo. Aunque si Robert Kraft le da un ultimátum a Belichick, quién sabe si opten por una medida desesperada como esa.
Una de las cosas que tampoco hemos tenido últimamente, es gente capaz de cuestionar a Belichick y McDaniels es una voz que respeta el entrenador. No solo eso, también entiende a su QB titular, lo suficiente, como para planear una offseason brillante que tiene dinero y recursos del Draft NFL para rearmar la ofensiva en algo superior.
Habrá quien cuestione la idea de alguien asumiendo un rol menor al que tenía, pero en la historia de los últimos 20 años, es una práctica común que los arropen (en parte porque los ex asistentes de Bill no lo quiere nadie), y luego de un tiempo, tengan trabajos esperándolos en la NFL. Así fue con Matt Patricia y ahora está en Philadelphia.
Siendo honestos, realmente hay pocas trabas para que ocurra nuevamente. En una situación como esta, traer gente que sabe cómo sacar las papas del fuego es positivo. Y para la otra parte, sin duda es su mejor camino para levantar su maltrecha carrera. ¿Qué tienen que perder?
¿Tú crees que deban darle otra oportunidad a Josh McDaniels en los Patriots? ¿Debería aceptarla? Puedes dejarnos tus comentarios debajo de este artículo o a través de nuestras publicaciones en redes sociales.
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