¿Los Patriots necesitan “urgencia” en esta Agencia Libre?

16 de marzo, tres días después del comienzo del período legal de negociaciones en la NFL, apenas 1 día tras el inicio de la Agencia Libre NFL 2023, y como cada año, no faltan los que se desesperan por el modo de operar de los Patriots en este mercado.

Y con una de las mayores cantidades para gastar en la liga, apenas utilizado en cuatro contrataciones externas (y muchas renovaciones de contrato), ¿no deberían cambiar el switch a un modo de urgencia?

Unos Patriots rezagados en este mercado

Después de todo, la AFC East está siendo cada vez más fuerte, y llegadas como la del QB Aaron Rodgers o CB Jalen Ramsey, solo complican el ya de por sí complicado panorama de la próxima campaña. Por su parte, las apuestas reflejan un equipo que se está quedando muy atrás en esta división:

El nerviosismo es notable, y salidas como la del WR Jakobi Meyers no tranquilizan a muchos. No es que el WR JuJu Smith-Schuster sea pésimo, todo lo contrario; pero seguimos a la espera de un receptor estelar que haga cambios profundos en la ofensiva, en lugar de leves mejoras a lo que hemos visto desde la partida de Tom Brady.

Tal vez ese es el meollo del asunto, porque en el fondo, nadie esperaba retener a estos jugadores que busquen pastos más verdes; más allá de quien se vaya o quién llegue, todo se resume a lo que traigas para reemplazarlo. No es extraño que algunos, como Tedy Bruschi, también sientan lo mismo:

“Que eso tan solo el inicio,” dijo tras la contratación de Smith-Schuster en ESPN. “Porque no hay esquinero en la AFC East que esté viendo ese movimiento y esté asustado. Mac Jones, él necesita más gente a la que lanzarle, que sea confiable, que pueda generar separación y atrapar el balón. Bill Belichick tiene que ponerse a trabajar.”

Pero leyendo tantas voces hablando de algo similar, tampoco debemos caer en el error de la urgencia, prima-hermana de la desesperación.

Un mercado sin sal y pimienta

Tomando de ejemplo la reciente contratación del ex receptor de los Chiefs, New England sí trajo a uno de los mejores agentes libres disponibles; pero al mismo tiempo, es un reflejo de un mercado pobre y hasta anímico si somos más objetivos. La carencia de estrellas ha hecho que en poco tiempo existan pocos fichajes adicionales que generen grandes titulares.

La liga cayó en la filosofía del personaje de Gordon Gekko de Wall Street (1987):

“La codicia, a falta de una palabra mejor, es buena; es necesaria y funciona. La codicia clarifica y capta la esencia del espíritu de evolución. La codicia en todas sus formas: la codicia de vivir, de saber, de amor, de dinero; es lo que ha marcado la vida de la humanidad… La codicia es buena. La codicia está bien. La codicia funciona. La codicia se abre camino, aclara y captura la esencia del espíritu evolucionario.”

Porque ahora los mejores jugadores no tienen ni la más mínima oportunidad de pisar el mercado; y todos firman antes de hacerlo. Lo que tenemos son excepciones, y en su mayoría, los agentes top son falsos, rotos u olvidados. Esperar que Odell Beckham Jr. recuerde ser un receptor estelar o buscar que Mike Gesicki no haya sido lo suficientemente dañado por Mike McDaniel es lo que hoy lidera la clase.

Mientras que los verdaderos playmakers reposan en sus equipos, con la única posibilidad de obtenerlos a precios exorbitantes. ¿Jerry Jeudy por una primera ronda? Primero debería alcanzar las 1 000 yardas en una temporada. ¿DeAndre Hopkins por múltiples selecciones? A esa edad será mejor que lleguemos al Super Bowl en dos años, no más.

La realidad es que los equipos crearon un sistema perfecto donde están ganando pase lo que pase. Ahora sumen a un equipo tradicionalmente conservador en su gasto, la combinación no es positiva. Mejor no lo pudo explicar Catanovski en un tweet:

¿A qué juegan estos Patriots?

Tampoco culpo a los Patriots, después de todo, ¿por qué irían gastando tanto capital por uno o dos jugadores cuando tienes tantas necesidades? La línea ofensiva, la secundaria, la línea defensiva y pensar en soluciones a largo plazo no se resuelven con una estrella y nada más. Por mucho que nos gustaría lo contrario, somos un proyecto al 50-70% completado.

Lo que sí coincido es que necesitamos movimientos importantes para la siguiente temporada. Solamente que es justo recordar la última vez que caímos presa de la desesperación en esta época del año. Incluso un hater de cepa como Ben Volin lo señala:

Parece que los Patriots aprendieron su lección de 2021, cuando gastaron como locos en la agencia libre – más de 175 millones de dólares totalmente garantizados en 25 agentes libres. Nuevos receptores, nuevos agentes libres, y todo un equipo completo, al tronar los dedos. Pero funcionó como siempre lo hace en la NFL: mal.

New England no quiere comprometerse otra vez; tampoco Robert Kraft lo permitiría con las costosas renovaciones del Gillette Stadium este año. Por mucho que él mismo habló de tener un mejor conjunto, tampoco está peleado con el gasto: ¿acaso no dio un dineral para traer a Bill O’Brien (coordinador ofensivo) y Adrian Klemm (línea ofensiva)?

Tampoco es el fin del mundo cuando un intercambio puede suceder en cualquier momento, no tiene fecha límite hasta varios meses entrada la temporada regular y el Draft NFL ofrece una clase profunda para jugadores en ataque. Lo que debemos esperar es que nuestro equipo piense muy bien su próximo movimiento.

Sé que suena mucho pedir para el aficionado promedio; pero la situación en la que se metan puede definir muchas cosas, pequeñas y enormes. Y en unos meses podríamos estar diciendo cómo metieron la pata en grande por pensar en caliente, y no en frío. No se preocupen si los Pats no aprovechan uno de los mercados más sosos en años… Urgencia no es la clave en esta época.

¿Cuáles son sus sensaciones de la Agencia Libre de los Patriots hasta este momento? Pueden dejarnos sus opiniones debajo de este artículo o a través de nuestras publicaciones en redes sociales.

También te puede interesar:

Deja una respuesta