Son tiempos de cambio en la NFL; los esquemas, jugadores e ideas ya no son lo que eran hace 10 años. Sin embargo, una persona siempre se ha caracterizado por adaptarse a su entorno: Bill Belichick. Aun así, es posible creer que, este año, su equipo luce hasta arcaico en comparación con los grandes exponentes del football moderno en la liga.
Incluso a este equipo le ha costado enfrentar a su propia división en los últimos meses. Ni que decir que existe una diferencia notable de rosters con equipos como los Bills. ¿Es acaso que este equipo se quedó atrapado en el tiempo o Bill Belichick todavía puede ser capaz de adaptarse a la nueva NFL?
¿Qué pasó con el Patriots Way?
Más allá de los claros problemas a la ofensiva, imposibles de ignorar, New England ha dejado que desear en varios aspectos que tenían dominados bajo Bill Belichick, principalmente la disciplina. Y es que cada semana es común que se cometa una enorme cantidad de castigos y varios jugadores realicen críticas al resto del equipo. Esto, en otros años, simplemente no ocurría.
También parece habitual que Bill Belichick comience a gritar, manotear y hasta insultar en su lugar en las laterales, totalmente frustrado de lo que ve en el campo. Por mucho que quiera defender a Matt Patricia con declaraciones como la siguiente, realmente no está feliz con lo que ve, ¿pero solo es culpa de ellos?:
A Bill Belichick le volvieron a preguntar si realmente no habrán cambios en su staff a la ofensiva: “El sistema que hemos implementado, nos sentimos bien con él, eso incluye al staff y a mí.”
Espaldarazo para Matt Patricia.
📸: Ian Steele pic.twitter.com/LLGrExd8x0
— Nación Patriota (@nacionpatriots) December 6, 2022
En el fondo, Belichick sabe que ha traicionado a su filosofía varias veces desde 2020, y no por dejar ir a Tom Brady o lo que tanto insisten los aficionados, más bien, porque los cambios que ha hecho a veces no corresponden a los tiempos que atraviesan los Pats.
Una reconstrucción en pausa
Este año no podemos decir que se hizo cualquier avance en la reconstrucción del equipo: no hay un QB franquicia tan clara, la misma base del 2021 será la que veamos al final de este año, sin apenas variar, y principalmente, existe la necesidad de volver a gastar un montón de dinero para compensar este roster.
Nada de esto sería así, de no ser por demasiadas decisiones que siguen siendo cuestionadas. En otras épocas, seguro, funcionarían, pero quizás Bill Belichick subestimó el contexto en que lo hacía actualmente. Mientras otros entrenadores, como el HC Andy Reid, hicieron una evolución necesaria en sus esquemas con una decisión atrevida (dejar ir a Tyreek Hill), a Bill le pasó exactamente lo opuesto.
Partiendo de la idea de que Matt Patricia no tiene experiencia en la ofensiva, ¿a quién le pudo parecer buena idea rechazar el viejo sistema y pedirle ejecutar uno ajeno a él como el de los 49ers con elementos del playbook de Alabama (con RPOs, etc.)? Ciertamente no solo era atrevido, iba más allá de lo razonable.
En buena medida por ello, el avance del año pasado simplemente se disipó por varias semanas, y aunque lo recuperen, no habrá mucho avance realmente este año. Pero dentro de lo bueno, es que la lección aprendida puede ser un punto de inflexión muy necesario.
Una cuenta pendiente
Bill Belichick llegará a la próxima campaña con una deuda consigo mismo; no conmigo, contigo o cualquier otro que se nos ocurra. Él sabe que se ha costado a sí mismo un año para estar más cerca de ganar otro Super Bowl, y el tiempo no perdona. Además, la responsabilidad de compensar lo vivido este año, sin duda, será enorme.
Cómo GM y HC de los Patriots, Bill Belichick necesitará de una inversión inteligente, enfocada en traer jugadores verdaderamente diferenciales que cambien la tendencia que vemos actualmente. Y por muy difícil que se lea, no es imposible, y tampoco debería para un genio como él (al que se le paga como tal):
Se estima que Bill Belichick recibe 20 millones de dólares al año como head coach de los #Patriots. Es el entrenador deportivo mejor pagado de los Estados Unidos.
[vía Sportico] pic.twitter.com/lSetnbqxQC
— Nación Patriota (@nacionpatriots) December 6, 2022
He de reconocer el buen trabajo de los siempre criticados Chris Grier y Howie Roseman, que sin el prestigio de Belichick, igualmente tenían un problema con su manejo del roster y personal en los últimos años. De alguna manera pudieron hacer un giro de 180° grados para convertir a sus equipos en contendientes, y más que eso, porque ahora luchan por la cima de sus respectivas conferencias. ¿Puede aprenderse algo de ello?
Lecciones importantes esta temporada
Siempre es importante tocar fondo, especialmente cuando se tiene talento, porque te hace cambiar de perspectiva y, con suficiente tiempo, cambias tu panorama de gran manera. Ya sea que ocurra este próximo lunes contra Cardinals o nos tengamos que esperar hasta el próximo año, uno debe confiar en que se encontrará la manera de salir adelante.
Muy probablemente Bill sea un firme candidato al Salón de la Fama del Football, es más, no debería ni que tardar en llegar a él cuando se retire; tampoco su legado no va a ser maltratado por estos últimos tres años, de ninguna manera; no obstante, tener el orgullo herido no debe ser agradable, y eso es lo que poco a poco está pasando.
Tal vez recuerden bien lo que aconteció en épocas de la dinastía donde algo fallaba mucho, y luego él buscaba la mejor solución: se trajo a Dante Scarnecchia del retiro para arreglar la OL tras 2015, Brian Flores cambió la defensiva en 2018 y en 2021 se pagó para llegar a playoffs. La pregunta sería: ¿qué hará ahora Bill Belichick para reforzar su Patriot Way más adelante?
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